Seguramente habrá escuchado del boom de la Cuarta Revolución Industrial (4RI): inteligencia artificial, realidad virtual y sensores remotos son el futuro de la humanidad. Más allá de avanzados algoritmos lingüísticos o videojuegos, el agua y el saneamiento también hacen parte de la 4RI.
Ni siquiera en América Latina y el Caribe hay acceso universal al recurso hídrico, a pesar de ser una región con un tercio del agua dulce del mundo. Siguiendo el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6, HydroBID y otros modelos del Banco Interamericano de Desarrollo buscan garantizar acceso universal al agua y saneamiento para el 2030. Mejorando la recolección de datos de cambios en el clima, la demanda del recurso y el uso del suelo se espera aportar a un control más eficiente del suministro y calidad de los servicios de agua. A gran escala, la implementación de recursos digitales de la 4RI como HydroBID en la planeación de servicios de infraestructura, haría que la economía de la región creciera en casi 6 pp.